Millones de profesionales de la salud y autoridades sanitarias de todas partes del mundo pasarán a la historia como los pilares más emblemáticos de la actual batalla que se enfrenta contra el coronavirus en esta pandemia, los héroes son ciudadanos comunes de nuestro entorno, brillantes y comprometidos profesionales que suman esfuerzos y desde sus puestos de médicos, enfermeros, administrativos, así como diversos funcionarios de los cuerpos de seguridad están logrando salvar vidas y mantener en alto la esperanza de que el triunfo es posible.
Hoy estos loables personajes ocupan la primera línea de batalla de lo que el presidente francés Emmanuel Macron ha descrito como una “guerra sanitaria” con un enemigo “invisible y escurridizo”. Trabajan sin descanso, muchas veces en medio de condiciones adversas, arriesgando sus vidas y la de sus seres queridos. Estos héroes son madres, padres, hijos, hijas, hermanas, esposos, abuelos que, por vocación, se mantienen firmes para controlar a tiempo el brote de coronavirus.
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Muy probablemente, siempre han sido héroes, pero la historia nunca antes había puesto de manifiesto tal importancia en todo el mundo y al mismo tiempo. En nuestra monotonía y obnubilación diaria del mundo globalizado actual, casi nunca hay tiempo para reflexionar acerca de nuestra gran indefensión hacia lo desconocido y la necesidad que tenemos de estar bien atendidos y de contar con los servicios elementales como está ocurriendo ahora.
Mientras el mundo se atrinchera progresivamente dentro de sus casas para protegerse contra el nuevo coronavirus, son los profesionales asistenciales quienes salen a las calles para trabajar largas horas atendiendo a un número creciente de personas contagiadas, convirtiendo sus profesiones en un riesgo latente. En todos los territorios se reconoce esta labor sin precedentes, a través de las redes sociales se vuelven tendencia los mensajes de aliento y apoyo por el trabajo incansable de quienes posicionan su vocación de servicio a la sociedad por encima de sus propios intereses. Sin duda son un ejemplo de valentía, y la mejor recompensa para este incalculable número de héroes es cumplir con sus indicaciones, respetar el aislamiento y así poder avanzar para que muy pronto nos unamos a ellos como una sociedad fortalecida.
Súmate al esfuerzo por controlar esta emergencia sanitaria, el Perú está en nuestras manos, sigamos las recomendaciones de nuestro Gobierno, quédate en casa”
Escrito por: Abg. Jessica Navarro
