Para una empresa que iniciará sus operaciones se requiere, como primer paso, elaborar un inventario con la estimación de todos los recursos que se requieren a corto y largo plazo para poner en marcha el negocio.
- Gastos de constitución: gastos que solo se realizarán una vez, en el momento de constituir formalmente la empresa (pueden considerarse costos hundidos ya que no se obtendrá utilidad directa de ellos, no son recuperables), estos son el costo de los trámites, gestión y notario, permisos, licencias, etc.
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- Inversión inicial en activos fijos: desembolsos que se realizaran para adquirir los bienes (físicos o intangibles) que se emplearán para producir, como maquinaria, útiles, compra de local o terrenos, aplicaciones informáticas, patentes, etc.; se consideran también los gastos de imagen de la empresa (nombre, logo, creación de una página web, etc.), como aquellos gastos que no se realizan periódicamente.
- Gastos de la actividad: necesarios para adquirir el activo circulante; es decir, la materia prima y materiales que se emplearán directamente en el proceso productivo (costos variables), así como el efectivo necesario para cubrir los gastos de los primeros meses. También se consideran los costos fijos los sueldos y salarios, servicios básicos (agua, luz, teléfono, Internet), publicidad y marketing, alquileres, intereses, impuestos, etc.
Escrito por: Econ. Jazmin Ramírez