En el universo de la tributación, las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) y el Impuesto a la Renta a menudo generan confusión. Para aclarar estas diferencias y maximizar el potencial financiero, es esencial comprender el Esquema de Determinación Tributaria.
Base tributaria
La Ley del Impuesto a la Renta (LIR) rige el esquema de determinación tributaria, definiendo qué rentas están gravadas, qué egresos son deducibles y cómo calcular la renta neta. Esta última se calcula considerando diversas variables, como las diferencias de cambio y las pérdidas tributarias, con una tasa del 29.5%.
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NIIF vs. LIR
Diferencias en el cálculo operativo:
Aunque el esquema tributario es claro, la controversia surge en el cálculo operativo. La renta neta imponible, punto de partida para el cálculo del Impuesto a la Renta, se basa en el resultado contable. Sin embargo, este resultado contable, derivado de las NIIF, no siempre es equivalente a la renta neta imponible, y aquí es donde se presentan las diferencias cruciales.
Diferencias fundamentales:
- Valor razonable vs. costo histórico: La LIR favorece el costo histórico, mientras que las NIIF se inclinan hacia el valor razonable, dificultando la conciliación tributaria.
- Forma Jurídica vs. sustancia económica: La LIR da importancia a la forma jurídica, mientras que las NIIF se enfocan en la sustancia económica. Las NIIF se centran en proporcionar información relevante a los inversores, considerando tanto los números actuales como la realidad económica, en lugar de enfocarse solo en la forma jurídica.
Recomendaciones
Para facilitar la conciliación de diferencias, se sugiere realizar cálculos periódicos, convirtiendo el resultado contable en renta neta imponible con ajustes por estimaciones y enfoque económico.
Escrito por: Grupo Verona