Nuestro país a través de la administración tributaria ha convertido en un objetivo de primer orden la lucha contra el fraude y el abuso fiscal, adoptando criterios propuestos por diversas organizaciones internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE. Esto a raíz de la coyuntura económica y la globalización de los mercados, que ha hecho necesario un mayor grado de conciencia ciudadana, en cuanto a los abusos y el fraude, persiguiendo una tributación más justa que garantice los recursos necesarios para el desarrollo del Estado. Uno de los más grandes riesgos de la internacionalización económica se relaciona con la deslocalización de rentas para obtener una ventaja competitiva, utilizando los precios de transferencia como mecanismos para la reducción de la carga tributaria.
Se puede definir que la planificación fiscal agresiva consiste en reducir la deuda fiscal aprovechando aspectos técnicos de un sistema fiscal, o las contradicciones entre dos o más sistemas fiscales, es decir, organizar el pago de los impuestos usando los vacíos o inconsistencias entre las normas de distintos países.
Ahora bien, la planificación fiscal internacional legitima, permite la libertad económica, pero dentro de límites, aunque el contribuyente busca reducir la carga tributaria, ello no necesariamente implica que todo ahorro fiscal configure una evasión o una elusión ilícita, la misión debe apuntar a que las empresas multinacionales compitan lealmente y paguen como las empresas locales tributos justos y proporcionales a las ganancias obtenidas en el territorio que recibe la inversión. Es por esto que la OCDE señala los tres principios en que se sustenta la implementación de medidas contra la planificación fiscal agresiva: la coherencia, la transparencia y la sustancia.
Como consecuencia de la crisis financiera internacional, las normas de transparencia fiscal internacional y la gestión de los Estados se han incrementado, tornándose en acciones multilaterales para el combate del flagelo del fraude fiscal internacional. En este sentido el Perú ha presentado importantes avances en el control de los riesgos tributarios vinculados a la planificación fiscal agresiva, incorporando en sus estrategias mayores acciones sobre los comportamientos que buscan una reducción indebida de las obligaciones tributarias.
Escrito por: Abg. Jessica Navarro