Un estudio realizado por la consultora Boston Consulting Group (BCG) descubrió que el 60% de los consumidores mantendrán una preferencia hacia la alimentación en el hogar incluso después de que se levanten las restricciones asociadas a la pandemia, lo que significará un menor gasto en restaurantes.
“Esto representa una oportunidad para que los minoristas decidan capitalizar el cambio de comportamiento de los consumidores y construyan una presencia rentable y duradera”, señaló el managing director & partner de BCG Rafael Agudo, añadiendo que “se espera que los nuevos hábitos alimenticios de los consumidores continúen hasta que se sientan seguros de no contraer el virus y económicamente estables”.
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En ese sentido, el estudio define seis tendencias que los supermercados y tiendas minoristas de alimentos deben seguir: incrementar sus canales de venta online, implementar formatos fluidos de atención, tomar en cuenta las actitudes del consumidor hacia marcas y productos, orientarse hacia promociones más específicas y no masivas, fortalecer su cadena de suministro, aprovechar el aumento de las fusiones y adquisiciones (que actualmente disminuyó en 20%-30%), e integrar el papel del impacto social en sus políticas.
Estas tendencias a su vez direccionan hacia tres medidas que los minoristas deberían implementar para ganar a largo plazo: reformar su canal de ventas (siguiendo la tendencia de comercio electrónico), reimaginar sus ofertas (adaptando su propuesta de valor a las necesidades del cliente) y reposicionar el negocio (siguiendo la tendencia de digitalización, resiliencia y sostenibilidad).
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Escrito por: Grupo Verona